domingo, 15 de abril de 2007

El Gran Secreto


Ayer tuve el Gran placer de ver en el Teatro Gayarre "El Gran Secreto", una obra de Albert Espinosa y Joan Font, representada por Els Comediants. Una obra que recomiendo a todo aquel que pueda ir a verla.

Es la historia del amor contada a través de la historia del teatro... o la historia del teatro contada a través de la historia del amor... Desde que éramos unos monos, hasta la modernidad representada a modo de ring de boxeo. Cada forma de amar es una etapa nueva del teatro, o cada etapa nueva del teatro es una nueva representación del amor. Desde el amor correspondido hasta el rechazo del otro, pasando por el amor a los recuerdos, el amor como sufrimiento, la monotonía, el amor prohibido por el entorno...

¿Amamos de la forma en que lo hacemos debido al teatro?

Personalmente la literatura, el cine, la música... y, como no, el teatro, me influyen cada día en la forma de ver el mundo. Por lo tanto, yo sí podría decir que amo de la forma en que lo hago debido al teatro así como a otras manifestaciones culturales. Nuestras preferencias en estos ámbitos marcarán, por tanto, nuestra forma de sentir y de amar.

La obra termina con una moraleja con la que nos invitan a averiguar con qué teatro nos sentimos más identificados, qué teatro representa nuestra forma de amar. Bueno, de los distintos géneros que se representaron, supongo que me siento más identificada con el Teatro Naturalista (teatro que surge a finales del siglo XIX y que trata de reproducir la realidad tal y como es, analizando el comportamiento humano y sus causas personales y sociales, a través del retrato de los personajes en su intimidad. Con ello entran en escena la infelicidad, los bajos instintos y los ambientes de pobreza). Aisss, sí, soy la alegría de la huerta jaja.


"El teatro no es un reflejo de la vida, sino que es la vida la que acaba copiando al teatro. El teatro, entendido como un relato, nos hace vivir la vida de una manera diferente." Joan Font

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Para empezar, te diré que me gustó mucho este post, entre otras razones, porque el teatro es una parte importantísima de mi visa - es lo que pasa cuando una se dedica a esto de las tesis doctorales, en fin....

No sé si sorprenderé mucho al decir que después de reflexionar sobre ello, he llegado a la conclusión que mi teatro es el del absurdo. Sí, el teatro del absurdo que busca un sentido a lo que nos rodea y sobre todo, el teatro del absurdo que lo que intenta es comunicar y comunicarse, por muy difícil que esto sea.
...Esto es lo que yo me propongo hacer: comunicar y comunicarme. Esta es mi forma de amar.

Anónimo dijo...

Oye, perdón por las preposiciones que me he comido en la fiebre del momento, jejeje!!

un beso

Thabitha dijo...

Jaja, buen comentario, me ha gustado. Sin embargo, mi idea del teatro del absurdo era precisamente sobre la imposibilidad de la comunicación, vaya, que no se llega a lograr.
Pero si es como dices, supongo que yo también tengo algo de absurda jeje.
Un beso!!

Anónimo dijo...

Ay, cómo se nota que no has leído todo lo que a Ionesco le dio por escribir (y no entiendo exactamente por qué no lo hiciste. Afortunadamente, todavía estás a tiempo de remediar esta grave deficiencia ;D)... Es que afirma en una controversia con un crítico británico (Keneth Tynan por su nombre), que él no defiende la imposibilidad de la comunicación en su teatro, ni en general, entre otras razones, porque si hubiese creído eso, habría dejado de escribir.
Lo que mantiene Ionesco es que la comunicación es, simplemente, muy difícil. Pero no imposible de lograr.

Así que sigo con la esperanza de que algún día, llegaré a entender y a ser entendida.

Aunque, claro, me queda la duda de si realmente quiero que alguien me entienda... Igual luego me llevan directamente al manicomio :D!!!!

un beso