Lawrence (Bill Nighy) es un funcionario que dedica su vida a su trabajo. Tímido e inseguro, un día comparte mesa en un café con Gina (Nelly MacDonald). Tras una breve conversación (el tiempo imprescindible para tomar un café y marcharse de nuevo al trabajo) Lawrence se lanza a ir más allá con esta joven.
En Reykjavic se va a celebrar la cumbre del G8. Los 8 más poderosos se juntarán para especular con su poder. Lawrence invita a Gina para que le acompañe y será así como ella irá viendo muy de cerca las injusticias que nos rodean cada día y por las que, aquellos que realmente pueden, no hacen nada.
Cuando no tienes nada, no puedes perder nada. Todo el valor que le falta a Lawrence para hacer aquello que le gustaría, le sobra a Gina que no se cortará ni un pelo en decir las cosas tal como son, sin diplomacias, sin delicadezas y sin importarle lo que pueda perder con ello. Pero... ¿es capaz una sola persona de cambiar algo?
A veces hay que arriesgarse por aquello en lo que de verdad creemos, sin miedos. Porque quizá... quién sabe, quizá podamos lograrlo!