La chica del café es una historia de amor y de principios. David Yates dirige esta película con la cumbre del G8 como telón de fondo.
Lawrence (Bill Nighy) es un funcionario que dedica su vida a su trabajo. Tímido e inseguro, un día comparte mesa en un café con Gina (Nelly MacDonald). Tras una breve conversación (el tiempo imprescindible para tomar un café y marcharse de nuevo al trabajo) Lawrence se lanza a ir más allá con esta joven.
En Reykjavic se va a celebrar la cumbre del G8. Los 8 más poderosos se juntarán para especular con su poder. Lawrence invita a Gina para que le acompañe y será así como ella irá viendo muy de cerca las injusticias que nos rodean cada día y por las que, aquellos que realmente pueden, no hacen nada.
Cuando no tienes nada, no puedes perder nada. Todo el valor que le falta a Lawrence para hacer aquello que le gustaría, le sobra a Gina que no se cortará ni un pelo en decir las cosas tal como son, sin diplomacias, sin delicadezas y sin importarle lo que pueda perder con ello. Pero... ¿es capaz una sola persona de cambiar algo?
A veces hay que arriesgarse por aquello en lo que de verdad creemos, sin miedos. Porque quizá... quién sabe, quizá podamos lograrlo!
Lawrence (Bill Nighy) es un funcionario que dedica su vida a su trabajo. Tímido e inseguro, un día comparte mesa en un café con Gina (Nelly MacDonald). Tras una breve conversación (el tiempo imprescindible para tomar un café y marcharse de nuevo al trabajo) Lawrence se lanza a ir más allá con esta joven.
En Reykjavic se va a celebrar la cumbre del G8. Los 8 más poderosos se juntarán para especular con su poder. Lawrence invita a Gina para que le acompañe y será así como ella irá viendo muy de cerca las injusticias que nos rodean cada día y por las que, aquellos que realmente pueden, no hacen nada.
Cuando no tienes nada, no puedes perder nada. Todo el valor que le falta a Lawrence para hacer aquello que le gustaría, le sobra a Gina que no se cortará ni un pelo en decir las cosas tal como son, sin diplomacias, sin delicadezas y sin importarle lo que pueda perder con ello. Pero... ¿es capaz una sola persona de cambiar algo?
A veces hay que arriesgarse por aquello en lo que de verdad creemos, sin miedos. Porque quizá... quién sabe, quizá podamos lograrlo!
5 comentarios:
Tiene pinta de ser una pastelada de narices! jaja ¿y ese no es el guionista de Love Actually? ufff que bajo estás cayendo, ya te veo tomándote el té con 4 cucharadas de azucar (no demasiado malo para un bar italiano).
Eso si, la McDonalds mola, como la mayoría de las escocesas...pero quién te recomienda esas pelis!??? ;P
Dicen que rectificar es de humanos, y después de la ñoñería de Love Actually parece que este guionista aprendió.
Y ya sabes, las 4 cucharadas de azúcar solo en los peores días.
Estas pelis me las recomienda mala gente... qué le vamos a hacer.
Saludos atún tun turún!!
No la he visto, ¿la habeis visto? ¿merece la pena?
Saludos
Antero: yo te la recomiendo. Me reí mucho con ella y dice cosas muy interesantes. Los personajes son algo atípicos y eso es lo que hace de la película y de la pareja algo hermoso. Si la ves, ya me contarás qué te parece.
Saludos!
Thabitha,la he visto hace unos días(intuyo que me la recomendó la misma persona que te la recomendó a ti)y me ha encantado,no he podido resistirme a dedicarle un post...
Saludos!
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