miércoles, 30 de diciembre de 2009

(In)comunicación


Me voy quedando sin palabras. Me agota la imposibilidad de comunicarme con la gente, como si hablara un idioma extraño que nadie entendiera. Y las conversaciones se convierten en un repetir constante de las mismas palabras creyendo que no es que no entiendan sino que no escuchan. Pero las palabras rebotan en un muro de cristal… una y otra vez…, convirtiéndose en simples ruidos carentes de significado.

Resulta paradójico que aquellas personas que no hablan mi idioma sean, a la vez, las que mejor me entiendan. Mientras que aquellas con las que comparto lenguaje, son incapaces de comprender lo que intento explicarles constantemente. Alguien me dijo que las palabras separan y empiezo a comprobar que es cierto.

Eugène Ionesco hablaba de la tragedia del lenguaje, “Más tarde, estas verdades elementales y sensatas se habían vuelto descabelladas, el lenguaje se había desarticulado, los personajes se habían descompuesto; la palabra absurda se había vaciado de su contenido y todo acababa en una pelea cuyos motivos era imposible conocer, pues mis héroes se lanzaban no ya réplicas, ni siquiera fragmentos de proposiciones, ni palabras, sino sílabas, o consonantes, ¡o vocales! ...”. El lenguaje ya no es un medio a través del cual entendernos sino un constante ir y venir de clichés, frases hechas sin ningún sentido, sonidos que no dicen nada.

17 comentarios:

Neo dijo...

jajaja
Ayer en el leroymerlin, la cajera que me cobraba les tuvo que repetir 3 veces a los que estaban detrás de mí que se pasaran a la otra caja, que iba a cerrar.
Ella y yo nos reíamos porque la gente estaba literalmente sorda! =)

Yo creo que tenemos mucho ruido, fuera y dentro del coco. EL truco es sintonizar bien. =)

1 bso

Thabitha dijo...

Sintonizar bien… puede ser… En la era digital esto debería ser fácil. Pero creo que nuestros cocos aún viven en la era analógica.
Compadezco a la pobre cajera porque las cabezas de la gente en estas fechas tienen más ruido del habitual y va a tener que dejarse la garganta para que ser escuchada.
Beso!

yo dijo...

Yo compadezco a quienes escuchan ruido y no saben distinguir tal cosa de lo realmente importante..
A mi, personalmente, hay ruidos que me agradan.. Otros los ignoro

Thabitha dijo...

Si te agradan dejan de ser ruidos, ¿no crees?.
Definición de ruido:
1. m. Sonido inarticulado, por lo general desagradable.
[...]
5. m. Ling. En semiología, interferencia que afecta a un proceso de comunicación.

yo dijo...

Por lo general

Neo dijo...

porqué te agotas? no luches por comunicarte, relájate y hazlo, simplemente. =)

Thabitha dijo...

Luchas por comunicarte cuando no eres comprendido. Te esfuerzas por ser entendido.
Otra opción es no hacerlo, callar directamente. No hay agotamiento si no hay esfuerzo ¿no?
No sé, en realidad creo que me da igual ;)

Anónimo dijo...

Y si no te esfuerzas, nadie hara por comunicarse contigo!
Nadie te conocera!
Y seguiras sintiendote sola e incomprendida!

Thabitha dijo...

Anónimo: el problema reside en que mis palabras no sean entendidas... Por ejemplo: ahora mismo me acabas de demostrar que no has entendido mis palabras. Y llevo 4 comentarios más el post intentando explicarme... Me agoto y, como consecuencia, decido dejar de explicarme... :)

Anónimo dijo...

Hay personas a las que les encanta hablar. ¿Habéis conocido a alguna de estas? Seguro que sí, no escuchan, te agotan mentalmente...eh!! y me encanta escuchar pero hasta cierto punto :)
Hace tiempo conocí a una persona de este tipo y al final descubrí que no le importaba lo que a mi me pasara y yo esforzaba por comunicarme y al final resultaba un esfuerzo en balde. Ahora, me he vuelto práctica y "huyo" de este tipo de personas.
Un abrazo,
Naiara.

Neo dijo...

jajaja
te lo repito:
hazlo, pero no te esfuerces en hacerlo, joven jedi.
=)
es más simple de lo que piensas. Sólo tienes que verlo en las cosas que haces sin esforzarte. =)
bso

Neo dijo...

Naiara:
Piensa en esto: ¿puede ser posible que la clave para escuchar y comunicar algo sea la misma?
Porque cuando hablas, tú también tienes que escucharte, para saber lo que estás diciendo, no?
Luego si eso es cierto, el que habla y no escucha, no sabe lo que dice. =)
=)

Canichu, el espía del bar dijo...

la comunicación sólo se da cuando hay comunicantes que se comunican, el problema es que hoy día pocos son los que hablan de verdad de algo que realmente quieran comunicar, y pocos hay que realmente escuchen más allá de oir. Un saludo.

MucipA dijo...

Thabitha, tienes mucha razón, de nada sirve hablar si las palabras no son comprendidas/escuchadas. La incomprensión reside en aquéllos que sólo oyen y son incapaces de escuchar y, por tanto, de comprender.
enhorabuena por el blog. Me gusta mucho! Entraré a menudo!
Saludos!

Anónimo dijo...

Neo,
No me había planteado si escucho lo que hablo...pero bien, pensaré sobre ello sin hablar. Menudo lío ;P
Canichu,
Me ha gustado lo que has escrito.

Rodolfo Serrano dijo...

A ver si escribes más a menudo.
Un beso

Felipe dijo...

Quizá no sea u problema de palabras , tal vez sea un problema de escucha.
Cuando uno escucha creo que sobran las palabras.

Un saludo