miércoles, 7 de abril de 2010

Una variante brutal del catolicismo, por Sinead O'Connor

Cuando era niña, Irlanda era una teocracia católica. Si se acercaba un obispo por la calle, la gente se apartaba para dejarle paso. Si asistía a un acontecimiento deportivo, el equipo se aproximaba a arrodillarse y besarle el anillo. Si alguien cometía un error, en vez de decir "Nadie es perfecto", decíamos "Podría pasarle hasta a un obispo".

Esta última frase era más certera de lo que imaginábamos. Hace unos días, el papa Benedicto XVI escribió una carta personal en la que pedía perdón -por decir algo- a Irlanda por los decenios de abusos sexuales a menores que cometieron unos sacerdotes en los que se suponía que debían confiar esos niños. Para muchos irlandeses, esa carta del Papa es un insulto no sólo a nuestra inteligencia, sino a nuestra fe y a nuestro país. Para entender por qué, hay que tener en cuenta que los irlandeses hemos sufrido una variante brutal del catolicismo basada en la humillación de los niños.

Yo lo viví en persona. Cuando era niña, mi madre -una madre maltratadora y todo lo contrario de lo que debe ser una buena madre- me animaba a que robara en las tiendas. En una ocasión me atraparon y pasé 18 meses en el Centro de Formación An Grianán, una institución para niñas con problemas de conducta en Dublín, por recomendación de una trabajadora social. An Grianán era una de las hoy tristemente famosas "lavanderías de las Magdalenas", patrocinadas por la Iglesia, que albergaban a adolescentes embarazadas y jóvenes poco dóciles. Trabajábamos en el sótano, lavando la ropa de los curas en fregaderos con agua fría y pastillas de jabón. Estudiábamos matemáticas y mecanografía. Teníamos poco contacto con nuestras familias. No cobrábamos ningún sueldo. En mi caso, por lo menos, una de las monjas fue buena conmigo y me regaló mi primera guitarra.

An Grianán era un producto de la relación del Gobierno irlandés con el Vaticano; la Iglesia gozó de una "posición especial" recogida en nuestra Constitución hasta 1972. Todavía en 2007, el 98% de los colegios irlandeses estaba en manos de la Iglesia católica. Pero los colegios para niños difíciles han estado siempre plagados de castigos corporales salvajes, maltratos psicológicos y abusos sexuales. En octubre de 2005, un informe encargado por el Gobierno identificó más de 100 acusaciones de abusos sexuales cometidos por sacerdotes entre 1962 y 2002 en Ferns, un pueblo a unos 100 kilómetros al sur de Dublín. La policía no investigó a los sacerdotes acusados; se dijo que padecían un problema "moral". En 2009, un informe similar involucró a los arzobispos de Dublín en la ocultación de varios escándalos de abusos sexuales entre 1975 y 2004.

¿Por qué se toleraba esa conducta criminal? Según el informe de 2009, el "importantísimo papel que ha desempeñado la Iglesia en la vida irlandesa es el motivo por el que se consintió que no se pusiera fin a los abusos cometidos por una minoría de sus miembros".

A pesar de la larga relación de la Iglesia con el Gobierno irlandés, la carta en la que el papa Benedicto pide teóricamente perdón no asume ninguna responsabilidad por las infracciones de los curas irlandeses. Dice que, "antes, la Iglesia en Irlanda debe reconocer ante el Señor y ante otros los graves pecados cometidos contra unos niños indefensos". ¿Qué hay de la complicidad del Vaticano en esos pecados?

En su texto, Benedicto da la impresión de que se ha enterado hace poco de los abusos y se presenta como una víctima más: "No tengo más remedio que compartir la desolación y la sensación de traición que habéis experimentado tantos de vosotros al saber de estos actos pecaminosos y criminales y de cómo se ocuparon de ellos las autoridades eclesiásticas en Irlanda". Sin embargo, la carta de infausta memoria que envió Benedicto en 2001 a los obispos de todo el mundo les ordenaba guardar secreto sobre las acusaciones de abusos sexuales so pena de excomunión, es decir, actualizaba una perniciosa política de la Iglesia, expresada en un documento de 1962, que establecía que tanto los sacerdotes acusados de delitos sexuales como sus víctimas debían "observar el más estricto secreto" y "atenerse a un silencio eterno".

Benedicto, entonces Joseph Ratzinger, era cardenal cuando escribió esa carta. Hoy, cuando ocupa el sillón de San Pedro, ¿vamos a creer que su opinión ha cambiado? ¿Y vamos a conformarnos ante las recientes revelaciones de que en 1996 se negó a destituir a un sacerdote acusado de haber abusado de hasta 200 niños sordos en el Estado norteamericano de Wisconsin?

La carta de Benedicto afirma que su preocupación es "sobre todo ayudar a sanar a las víctimas". Sin embargo, les niega lo que podría sanarles: una confesión inequívoca del Vaticano de que ocultó los abusos y ahora está tratando de ocultar el ocultamiento. Asombrosamente, el Papa invita a los católicos a "ofrecer vuestro ayuno, vuestras oraciones, vuestra lectura de las Escrituras y vuestras obras de misericordia para obtener la gracia de la curación y la renovación de la Iglesia de Irlanda". Y sugiere, cosa aún más asombrosa, que las víctimas irlandesas pueden sanar acercándose más a la Iglesia, la misma Iglesia que exigía votos de silencio a los niños víctimas de los abusos, como ocurrió en 1975 en el caso del padre Brendan Smyth, un sacerdote irlandés que más tarde acabó en la cárcel por delitos sexuales repetidos. Muchos irlandeses, cuando se nos pasó la risa, nos dijimos que la idea de que necesitamos la Iglesia para aproximarnos a Jesús es una blasfemia.

Para los católicos irlandeses, lo que insinúa Benedicto -que los abusos sexuales en Irlanda son un problema irlandés- es arrogante y blasfemo. El Vaticano está actuando como si no creyera en un Dios que todo lo ve. Quienes dicen ser los guardianes del Espíritu Santo se dedican a aplastar todo lo que el Espíritu Santo representa. Benedicto es culpable de dar una imagen falsa del Dios al que adoramos. Todos sabemos, en el fondo de nuestro corazón, que el Espíritu Santo es la verdad. Por eso sabemos que Cristo no está con esos que le invocan con tanta frecuencia.

Los católicos irlandeses tienen una relación disfuncional con una organización que comete abusos. El Papa debe hacerse responsable de las acciones de sus subordinados. Si hay sacerdotes católicos que abusan de los niños, es Roma, y no Dublín, la que debe responder de ello, con una confesión inequívoca y sometiéndose a una investigación criminal. Mientras no lo haga, todos los buenos católicos -incluidas las ancianitas que van a misa todos los domingos, no sólo los cantantes protesta como yo, a quienes el Vaticano puede ignorar sin problema- deberían dejar de acudir al templo. Ha llegado la hora de que en Irlanda separemos a nuestro Dios de nuestra religión y nuestra fe de sus supuestos dirigentes.

Hace casi 18 años, rompí una fotografía del papa Juan Pablo II en un episodio de Saturday night live. Muchos no entendieron la protesta; la semana siguiente, el presentador invitado del programa, el actor Joe Pesci, dijo que, si hubiera estado presente, me "habría dado una bofetada". Yo sabía que mi acción iba a causar problemas, pero quería provocar un debate necesario; ese es uno de los ingredientes de ser artista. Lo único que lamenté fue que la gente pensara que no creía en Dios. No es verdad, en absoluto. Soy católica de nacimiento y cultura, y sería la primera en presentarme a la puerta de la iglesia si el Vaticano ofreciera una reconciliación sincera.

Mientras Irlanda soporta la ofensiva carta con la que Roma pide perdón y un obispo irlandés dimite, pido a los estadounidenses que comprendan por qué una mujer católica irlandesa que sobrevivió a los malos tratos de niña pudo querer romper la foto del Papa. Y que piensen si a los católicos irlandeses, por no atrevernos a decir "merecemos algo mejor", se nos debe tratar como si mereciéramos algo peor.

© Sinead O'Connor, 2010

Traducción de María Luisa Rodríguez Tapia.
Tomado de El Pais


Sinnead O'Connor - I feel so different

6 comentarios:

Antero dijo...

No había leído este post y me he quedado frío. Muy interesante lo que cuenta Sinead O'Connor.
El dominio que tiene la iglesia católica en Irlanda es excesivo. El poder muchas veces corrompe, da igual que se trate de políticos, abogados, sacerdotes y lo peor es que en muchas ocasiones en lugar de tomar medidas drásticas, se intenta tapar o minimizar el problema.

Saludos

LU dijo...

Si ya son graves los abusos cometidos durante tantos años, peor todavía es la permisividad, hipocresía y pasividad de los que pueden tomar decisiones, y no hanlo solamente de la iglesia.

Terrible.

JOSU dijo...

La religión ciega a las familias. Si no , es incomprensible, que hasta despues de tantos años se haya estado guardando silencio. ¿Donde estaban los padres? Ciegos.
También es extraño, que en toda Europa esten destapandose los casos y aquí parece que no sucedió nada... a pesar de la dictadura. ¿Extraño ? ¿No?. ¿O es que justamente por vivir en la dictadura se hace comprensible que sucedieran esos casos?.

En un pais donde se quiere hacer delito el destapar las fosas donde están enterrados los asesinados por el fascismo, todo es posible.

Me he extendido demasiado ¿No?. Perdona, pero es que el post, bufff... me ha puesto a cien!!
Un saludo.

troyana dijo...

Bravo por esta Sidned O´Connor,valiente y comprometida.Basta de complacencia y basta de permisividad ante abusos de poder y autoridad,vengan de la iglesia,del estado o de cualquier otra institución con potestad para someter y vejar al individuo,más a los frágiles e indefensos,en este caso, los niñ@s.
bss

Thabitha dijo...

Basta ya de abusos de poder, de aprovecharse de su situación acomodada y privilegiada. Basta ya de jugar con las ideas, sentimientos y debilidades de los demás. Basta ya de cerrar los ojos o mirar para otro lado ante las injusticias...

Anónimo dijo...

jesucristo es Dios y el creo la iglesia cuando estuvo aca en la tierra. Dios es perfecto, por lo tanto todo lo que el crea es perfecto. asi pues la iglesia fue creada para nosotros sus hijos y decir que la iglesia catolica no esta con jesucristo es un error grandisimo para una persona que dice "ser catolica de nacimiento" seguramente lo era cuando nacio pero ahora es una catolica con muchas equivocaciones. que puede ser cierto que en irlanda hayan habido muchas violaciones por parte de sacerdotes catolicos, pero no por eso voy a dejar de creer en la iglesia catolica que el mismo Dios creo y fundo para toda la humanidad. es absurdo pensar asi y decir en publico rompiendo una foto del papa juan pablo II "pelear contra el verdadero enemigo" refiriendose al papa y toda la iglesia catolica.

es tan absurdo dejar de creer en la iglesia por unos pocos que la hacen quedar mal. podriamos poner un ejemplo practico:

si un doctor se equivoca y no atiende un paciente que esta en peligro simplemente por que le dio pereza y el paciente muere, ¿entonces podriamos decir que todos los doctores son malos por que un doctor se equivoco al no atender a dicho paciente? me parece absurdo creer esto. los demas doctores no ha tenido culpa en eso y no por que eso le suceda a uno es motivo para dejar de creer en la medicina. asi mismo si un sacerdote se equivoca (o siquieres pon 20 sacerdotes) no por eso voy a dejarde creer en los demas sacerdotes y en la iglesia que Dios creo.

ahora supongamos el caso (que no es cierto, solo es suposicion para que me entiendan) que todos los sacerdotes sean violadores. aun asi seguire creyendo en la iglesia! por que yo creo en su fundador jesucristo!, la gente que pierde su fe en la iglesia es por que desconocen al mismo Dios.

es lamentable que eso ocurra, es verdad. pero no es motivo para decir que jesucristo no esta con la iglesia catolica si fue el mismo quien la fundo. y si la fundo fue para quedarse con nosotros hasta el fin de los tiempos. por lo tanto lo que dice sinead "nos dijimos que la idea de que necesitamos la Iglesia para aproximarnos a Jesús es una blasfemia." es prueba de que descoce las enseñanzas de JESUS y sus palabras ya que fue el msimo el que creo la iglesia para nosotros.

hay que entenderla a esta mujer que seguramente ha sufrido como muchos de nosotros mal tratos y abusos y es entendible que puede tener resentimientos en contrade la iglesia para dedcir estas cosas pero tampoco es motivo para creer lo que ella dice. que tiene argumentos para pelear contra los errores que la iglesia ha cometido y tratar de mejorarla es una cosa que respeto y la valoro.
pero decir que jesucristo no esta con la iglesia catolica es un error muy grande y ojala la gente que cree en DIOS pueda entender esto que he querido manfestarles.

gracias.